Hoy es día para agradecerte por el don de la vida, por la alegría de un nuevo despertar y lo que podremos realizar. Gracias por el ejemplo de aquellos inocentes que proclamaron las grandezas de tu amor entregando su vida. Que su ejemplo nos ayude a ser testimonio de humildad y sencillez, de servicio y generosidad anunciando que tú estás en medio de nosotros.
Los Santos Inocentes, mártires a los que hoy honramos, dieron testimonio de ti, no proclamando tu nombre con palabras, sino entregando su vida por ti sin ser conscientes de ello. Ayúdanos en el día de su fiesta, que sepamos dar testimonio tanto por las palabras que decimos como por la forma como vivimos nuestra fe. Hoy habrá motivos para vivir el día de estos pequeños de otra manera, haciendo inocentadas y bromas por el día. A nosotros danos ocasión de vivirlo con la esperanza y la fraternidad de ser verdaderos discípulos de tu amor y testigos de misericordia. Hoy amemos de corazón y con sentimientos de reconciliación.
Feliz y bendecido martes.
